sábado, 12 de diciembre de 2009

La palabra nos indica el camino


3ª Semana de Adviento

Lunes, 14 de diciembre: SAN JUAN DE LA CRUZ
“¿Con qué autoridad haces esto?” (Mt 21,23)
La Presencia de Dios en tu vida fortalece tu caminar. Ha sido El quien ha sacado fortaleza de tus cobardías, que ha sido El quien ha puesto en tu corazón una fuente de alegría. Jesús es tu fonte, la que mana y corre aunque sea de noche. Jesús es cada ser humano; amarle a El y ponerte a lavar los pies y desvelar la dignidad y belleza de los más perdidos, todo tiene en Dios su nacimiento.

Camina en el amor, porque el alma que anda en amor ni cansa ni se cansa. ¡Ven, Señor Jesús!

Martes, 15 de diciembre
“Los publicanos y prostitutas os llevan la delantera en el camino del reino de Dios” (Mt 21,31)
En los más marginados de la sociedad, el Dios sorprendente se abre camino. Tu vida sencilla y orante puede ser una pequeña luz que habla de Dios en medio del mundo. Allí donde la incomprensión y el odio, el racismo y el enfrentamiento entre religiones surgen como una llaga que tarda en cicatrizar, tu testimonio, unido al de otros muchos, puede ser una antorcha encendida en medio de la noche.

¡Enciende la llama de tu amor en la humanidad herida

Miércoles, 16 de diciembre“¿Eres tú el que ha de venir, o tenemos que esperar a otro?” (Lc 7,20)
La verdadera unión con Dios, tras la que caminas, no está en cosas extraordinarias y llamativas, que fascinan y asustan a la vez. La unión con Dios no rompe tu humanidad, sino que la embellece y la recrea. La unión con Dios acontece en Jesús, que viene. El es tu plenitud.

Cristo, tu sabiduría es mi sosiego. Tu luz mi verdad. Tu poder mi fuerza en la debilidad. Tu cruz mi salvación.

Jueves, 17 de diciembre
Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús llamado Cristo” (Mt 1,16)
Jesús recoge, como en un cuenco, toda la herencia anterior, pero a su vez es una novedad. La Palabra, símbolo de un Dios deseoso de comunicarse, se hace humanidad y acampa en la tierra de los hombres. Por la encarnación, también tu tierra lleva dentro una semilla de amor. Es tu vocación, déjala crecer.

Señor, que en mi vida aflore tu belleza. Que tu vida en mí sea un don para todos.

Viernes 18 de diciembre
“La criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo” (Mt 1,20)
María dejó que Dios entrara en el tejido de su vida y el Espíritu alumbró en ella posibilidades nuevas. Invoca al Espíritu, El es el gran protagonista de lo nuevo en ti.

Espíritu Santo, ayúdame a colocarme en medio como quien sirve, como un humilde reflejo de tu perdón, ternura y cercanía.

Sábado, 19 de diciembre
“¿Cómo estaré seguro de eso? Porque yo soy viejo y mi mujer es de edad avanzada” (Lc 1,18)
Zacarías es un orante y, por tanto, un buscador de sentido para su vida. Se acerca como tantas veces al templo, pero esta vez Dios ensancha el espacio de su tienda, rompe sus límites, y ahí, el marido de Isabel, se detiene y no entiende.

Señor, me abro confiado/a a tu gracia, siempre me sorprendes y desbordas.